La Ciudad del Vaticano hoy
Con una superficie de apenas 44 hectáreas, el Estado de la Ciudad del Vaticano es el Estado independiente más pequeño del mundo, tanto en términos de población como de extensión territorial. Sus fronteras están delimitadas por las murallas y, en la plaza de San Pedro, por la franja de travertino que une las dos alas de la columnata. Además del territorio propiamente dicho del Estado, la jurisdicción vaticana se extiende también en cierto sentido sobre determinadas zonas dentro y fuera de Roma, que gozan del derecho de «extraterritorialidad».
El Estado de la Ciudad del Vaticano nació con el Tratado de Letrán, firmado el 11 de febrero de 1929 entre la Santa Sede e Italia, que sancionó su personalidad como entidad soberana de derecho internacional público, instituida para asegurar a la Santa Sede, en su calidad de institución suprema de la Iglesia católica, «una independencia absoluta y visible y para garantizarle una soberanía indiscutible incluso en el ámbito internacional», según se afirma en el preámbulo del citado Tratado.
La Iglesia católica lleva a cabo su misión evangélica tanto a través de las diversas Iglesias particulares y locales, como de su gobierno central, constituido por el Sumo Pontífice y los Organismos que le asisten en el ejercicio de sus responsabilidades para con la Iglesia universal (Santa Sede).
La forma de gobierno es la monarquía absoluta. El Jefe del Estado es el Sumo Pontífice, que tiene plenos poderes legislativo, ejecutivo y judicial. Estos poderes, durante la Sede vacante, se delegan en el Colegio Cardenalicio. El poder legislativo, además del Sumo Pontífice, lo ejerce en su nombre una Comisión formada por un Cardenal Presidente y otros Cardenales y otros miembros, nombrados por un mandato de cinco años. El poder ejecutivo se delega en el Presidente de la Comisión que, como tal, toma el nombre de Presidente del Governatorato y es asistido por el Secretario General y el Vicesecretario General. De él dependen las direcciones y oficinas centrales en las que se organiza la Gobernación, es decir, el conjunto de órganos a través de los cuales se ejerce este poder. El poder judicial es ejercido, en nombre del Sumo Pontífice, por los órganos constituidos según el sistema judicial del Estado.
El Estado de la Ciudad del Vaticano tiene bandera propia que se distingue por dos campos divididos verticalmente, uno amarillo, adherido al báculo, y otro blanco en el que aparece la tiara papal con las llaves decusadas. Acuña su propia moneda, que actualmente es el euro, y emite sus propios sellos postales. En el Vaticano se publica un diario, L'Osservatore Romano, fundado en 1861, y desde 1931 existe una emisora de radio, Radio Vaticano, que emite a todo el mundo en varios idiomas.
Las necesidades de seguridad del Papa y del Estado son atendidas por el Cuerpo de la Guardia Suiza, fundado en 1506, cuyos miembros visten un uniforme que, según la tradición, fue diseñado por Miguel Ángel, y el Cuerpo de la Gendarmería Pontificia, que se encarga de todos los servicios policiales y de seguridad del Estado.