Inaugurada la exposición “Las Almas de Bernini” en los Museos Vaticanos
Solidaridad con las poblaciones de Valencia y de toda España afectadas por la Dana
El arte, la cultura y el Jubileo pueden ser ocasiones de solidaridad y apoyo a las poblaciones afectadas por desastres naturales, como las de Valencia, víctimas de la ya conocida Dana. La exposición “Las Almas de Bernini”, inaugurada el martes por la tarde, 19 de noviembre, en los Museos Vaticanos, por el Cardenal Fernando Vérgez Alzaga, Presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, y por S.E. María Isabel Celaá Diéguez, Embajadora de España ante la Santa Sede, es un reflejo de lo estrechamente entrelazadas que están las relaciones entre las grandes obras de arte y la caridad. En este contexto, el Cardenal Vérgez Alzaga, en su intervención, expresó su más sentido pésame y su oración por las víctimas y por todos aquellos que se han visto afectados por la “desastrosa Dana del 29 de octubre pasado, que devastó la región de Valencia y otras zonas de España, y, la semana pasada, también Málaga y Granada”.
Por su parte, la Embajadora de España ante la Santa Sede, S.E. María Isabel Celaá Diéguez, destacó que con esta exposición en los Museos Vaticanos de las dos obras juveniles de Gian Lorenzo Bernini, “Alma Beata” y “Alma Condenada” – que habitualmente no son accesibles al público, ya que se conservan en el Palacio de España en Roma y son propiedad de la Opera Pia-Stabilimenti Spagnoli en Italia – “la Embajada de España desea participar en el Jubileo de 2025”. También anunció que los ingresos obtenidos de la venta del catálogo de la exposición serán destinados a la población de Valencia. La inundación, añadió la Embajadora, es “una enorme tragedia provocada por el cambio climático, que ha causado una gran pérdida de vidas humanas y bienes materiales”.
En su intervención, la doctora Barbara Jatta, Directora de la Dirección de Museos y Bienes Culturales, explicó que Bernini “fue el gran maestro del Barroco” y que “no cabe duda de que el Vaticano no sería lo mismo” sin sus “geniales creaciones”. Por esta razón, explicó la Directora, “la propuesta de S.E. la señora Isabel Celaá Diéguez, Embajadora de España ante la Santa Sede, de exponer en los Museos Vaticanos Las Almas de Bernini – obras generalmente inaccesibles al público y que dan testimonio de su sorprendente capacidad técnica y artística desde su juventud – fue recibida con entusiasmo y con el deseo de compartirlas con los numerosos visitantes que frecuentan los Museos Vaticanos”.
Aún más significativa, señaló Jatta, “es la decisión de organizar la exposición en proximidad con la apertura del Año Jubilar 2025, lo que refuerza el valor de un artista universal que hizo de los movimientos del alma – tan increíblemente expresados en estas dos pequeñas esculturas – la característica principal de toda su obra, lo que también resulta especialmente pertinente para los actuales temas jubilares”.
La doctora Helena Pérez Gallardo, Catedrática de la Universidad Complutense de Madrid y comisaria de la exposición junto con Barbara Jatta, también destacó que la muestra ofrece obras que reflejan la síntesis del estrecho vínculo entre España e Italia en el contexto de la Contrarreforma del siglo XVII.
La exposición permanecerá abierta en la Sala XVII de la Pinacoteca Vaticana hasta el 31 de enero de 2025.
Publicamos a continuación el discurso del Cardenal Presidente:
Saludo cordialmente a la Embajadora de España ante la Santa Sede, S.E. María Isabel Celaá Diéguez,
a la Directora de los Museos y Bienes Culturales, Barbara Jatta,
a la Doctora Helena Pérez Gallardo, Curador de la Exposición
Excelencias, autoridades, distinguidos invitados y a todos los presentes.
Estamos reunidos para inaugurar la exposición "Las Ánimas de Bernini". Es, esencialmente, el signo de la fecunda colaboración de los Museos Vaticanos con la Embajada de España ante la Santa Sede.
Por eso, estoy muy agradecido a la Embajadora por el amable préstamo de los dos bustos, obras de Bernini, que desde hoy serán aquí expuestos. La Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano está muy contenta de poder colaborar con España, sobre todo en el ámbito del Jubileo.
Esta iniciativa fue querida y promovida por la Embajada de España ante la Santa Sede y personalmente la he promovido con entusiasmo. Como ya sabéis, mi origen es español. Nací en Salamanca, España, y esto me permite aprovechar hoy la ocasión para expresar mi más sentida partecipación y mi continua oración por las víctimas y por todos los afectados por la catastrófica DANA del pasado 29 de octubre, que devastó la región de Valencia y otras regiones de España, y la semana pasada también Málaga y Granada.
Siempre tengo ante mí las imágenes de la terrible inundación. Me impresionó ver a la gente cubierta de barro en medio de las calles llenas de objetos y escombros. También me impresionó la solidaridad de las personas que se pusieron inmediatamente a ayudar a los vecinos, tratando de quitar el barro y liberar las casas del agua. Por eso, transmito a S.E. la Embajadora mi cercanía a toda la población que ha sufrido, sobre todo, por los que han perdido todo.
Este recuerdo representa, además, la ocasión para demostrar cuánto el arte puede acercarse a la fe y ser instrumento de salvación. Me refiero a las imágenes desgarradoras del "Cristo yacente" de la parroquia de San Jorge en Paiporta, localidad considerada la zona cero de la Dana. El rostro de Cristo estaba completamente cubierto de barro, casi identificándose con los cientos de muertos y heridos de la gran tragedia. Expresaba la participación de Cristo en los sufrimientos de la humanidad que en ese momento estaba en prueba. De esta manera, un objeto de arte transmite el gran mensaje de la fe.
Lo mismo ocurre con las obras maestras de Bernini que, desde hoy, pueden ser admiradas por los visitantes. Las dos ánimas, "el ánima beata" y "el ánima dannata" se contraponen a expresar, por una parte la felicidad de un alma en paz con Dios y consigo misma, por otra la desesperación de quien no ha sabido acoger la esperanza que Cristo ofrece a cada uno.
Giovan Lorenzo Bernini trabajó en uno de los siglos más fervientes de proyectos y empresas: el siglo XVI. El gran Maestro tuvo el privilegio de tener una relación profesional y artística con ocho Pontífices y con algunos de ellos estableció una estrecha relación de confianza y amistad.
La Ciudad del Vaticano encuentra su caracterización también gracias a las sorprendentes obras realizadas por él: el Baldaquino de la Basílica Petrina, la Cátedra de San Pedro, los monumentos funerarios de Urbano VIII y Alejandro VII, la espléndida Scala Regia, la famosa y envolvente Plaza de San Pedro con su columnata, la estatua de Constantino, el paño de la Sala Ducal, pero también el corpus de sus dibujos y los documentos conservados en la Biblioteca Apostólica Vaticana, los bocetos y modelos para sus esculturas hoy en los Museos Vaticanos y mucho más. El Estado del Vaticano debe mucho a las geniales hazañas de Bernini.
Por este motivo, la propuesta de S.E. la Señora Isabel Celaá Diéguez, Embajadora de España ante la Santa Sede, de exponer en los Museos Vaticanos las Ánimas del Bernini - obras generalmente inaccesibles al público y que testimonian su sorprendente capacidad técnica y artística desde la juventud - ha sido acogida con entusiasmo y con voluntad de compartir con los numerosos visitantes que frecuentan los Museos del Papa.
Con esta exposición dedicada a "Las Ánimas de Bernini", la Embajada de España ante la Santa Sede quiere ofrecer su contribución al Jubileo 2025, poniendo a disposición del público dos obras que de otro modo no serían fácilmente visibles. Esta exposición es, por tanto, una ocasión para reforzar las relaciones de amistad y cooperación entre España y la Santa Sede.
El Palacio de España es uno de los edificios más emblemáticos del centro histórico de Roma. La misión diplomática española es considerada como la misión permanente más antigua del mundo. Se estableció allí en 1622 para representar a España ante la Santa Sede. En este sentido el Palacio es la principal expresión de la fuerte presencia española a lo largo de los siglos en la Ciudad Eterna.
Desde principios del siglo XVII la Embajada ha sido centro de actividad cultural con conciertos, representaciones teatrales y visitantes ilustres. Con el tiempo se ha acumulado un patrimonio incalculable, que incluye las dos obras talladas por Bernini en 1619, que podemos decir son las "joyas". Obras de arte que tienen un mensaje para la humanidad.
Deseo expresar mis felicitaciones y mi gratitud a la Embajadora de España, S.E. María Isabel Celaá Diéguez, y a los organizadores de la exposición en los Museos Vaticanos por esta iniciativa que contribuye a difundir en el Vaticano las riquezas de la cultura de esta ciudad de Roma.
Que la Virgen del Pilar proteja a toda España y asista maternalmente a cuantos la invocamos como Patrona de la Hispanidad. Gracias.