Ceremonia con ocasión de la inauguración del Pesebre y del encendido del árbol de Navidad en la plaza de San Pedro

El Cardenal Fernando Vérgez Alzaga y la Hna. Raffaella Petrini, respectivamente Presidente y Secretaria General de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, inaugurarán el Belén e iluminarán el árbol de Navidad, instalado en la Plaza de San Pedro. La ceremonia tendrá lugar el sábado 7 de diciembre a las 18.30 horas.

Por la mañana, también se inaugurará, en el Aula Pablo VI, la “Natividad de Belén 2024”, un conjunto de representaciones de la Natividad, todas producidas y realizadas en Belén por artesanos locales. Estará presente, para la ocasión, la representación de la Embajada del Estado de Palestina ante la Santa Sede.

Al mismo tiempo, también en el Aula Pablo VI, las Delegaciones serán recibidas en audiencia por el Papa Francisco para la presentación oficial de los regalos.

En la ceremonia de la tarde, estarán presentes las delegaciones oficiales de los lugares de origen del pesebre y del árbol en la plaza de San Pedro, procedentes respectivamente de Grado, en la diócesis de Gorizia, y de Ledro, en la diócesis de Trento. En particular, para el belén artístico participan, entre otros, el obispo de Gorizia, monseñor Carlo Roberto Redaelli, el comisario del proyecto caballero Antonio Boemo, el alcalde, Giuseppe Corbatto, y la banda cívica “Città di Grado”.

Por el árbol de Navidad participarán, entre otros, el obispo de Trento, monseñor Lauro Tisi; el presidente de la provincia de Trento, Maurizio Fugatti; el alcalde de Ledro, Renato Girardi; el coro Cima d’Oro, el cuerpo de bandas Val di Ledro y el grupo de acordeones Città di Arco.

El Belén y el árbol en la Plaza de San Pedro permanecerán expuestos hasta el final del Tiempo de Navidad, que coincide con la fiesta del Bautismo del Señor, el domingo 12 de enero de 2025.

La gran obra del Belén, que Grado lleva este año a la plaza de San Pedro del Vaticano tiene, además de la centralidad del nacimiento del Niño Jesús, como hilo conductor el amor, proponiendo también escenas de la vida cotidiana ricas en afecto y laboriosidad.

Grado lleva, por tanto, a la plaza de San Pedro el pesebre de la Comunidad, realizado por unas cuarenta personas, todos voluntarios, profesionales y artistas en sus respectivos campos, expresión en buena parte del asociacionismo local.

Como ambientación se ha elegido uno de los diferentes aspectos de la ciudad balneario-curativa, es decir, el de su laguna, única, viva, que también se vincula a la historicidad de la isla siendo, refiriéndonos al lejano período de los patriarcas, la hija de Aquilea pero, sobre todo, la madre de Venecia.

Una laguna que una vez estuvo habitada de forma estable por cientos de gradeses, los llamados “casoneri”, porque vivían en los “casoni”, las típicas construcciones de cañas.

Y precisamente dentro de un “casone” se encuentra la Natividad, obra realizada, junto con todas las demás numerosas estatuas, por padre e hija, Lorenzo y Francesca Boemo.

Estatuas que tienen la característica de estar llenas de barro, precisamente el de la laguna. La ambientación elegida es la de principios del siglo XX.

Los “casoneri” regresaban a Grado solo tres veces al año, por Pascua, por el “Perdón de Barbana”, la procesión votiva de los grades que van a dar gracias a la Virgen del Santuario de la isla de Barbana y, naturalmente, por Navidad.

La idea y la coordinación de todo lo que Grado está preparando para “desembarcar” en la plaza de San Pedro, es del caballero Antonio Boemo. El diseño detallado y la coordinación técnica son, en cambio, del arquitecto Andrea de Walderstein.

Es oportuno hacer referencia a “desembarcar”, palabra perfectamente pertinente, ya que la obra prevé también, dentro de un largo dique (un centenar de metros de bloques de poliestireno trabajado a mano), la presencia de agua, donde flotarán dos “batele” (bateles), las características barquitas de fondo plano para recorrer los canales de la laguna. Tampoco faltará una pequeña playa con una abuela que vigila a los nietos y al perro.

Cuando se habla de laboriosidad, es necesario recordar que en la laguna, excepto los niños pequeños que asistían a la escuela que se encontraba en la isla de Ánfora, todos trabajaban para ayudar a salir adelante. Por lo tanto, también las mujeres. Y será precisamente una de ellas, una mujer pescadora que ayudaba a su marido, quien conduzca la “batela” (batel) con los Reyes Magos a bordo.

En medio de la laguna, como en la realidad, también hay algunas “briccole” (duques de alba), una estructura náutica utilizada para indicar las direcciones a seguir: Aquileia, el santuario de la Virgen coronada de la isla de Barbana, Trieste y Venecia. Y luego la rica vegetación y la avifauna realizada con la impresora 3D. A propósito de esto, para evitar la llegada masiva de gaviotas, se han colocado dos bolardos ultrasónicos con frecuencia variable.

La pasión de los belenes de Grado está muy arraigada, tanto que desde hace muchos lustros se celebra una importante muestra con las obras expuestas, tanto a lo largo de las calles del centro histórico, de típica impronta veneciana, donde también hay dos preciosas basílicas paleocristianas (la dedicada a Santa Eufemia fue consagrada en el año 579 por el Patriarca Elías), como en otras partes de la ciudad, también en salas especiales.

El Belén, que se expondrá en el Aula Pablo VI, quiere recordar la Tierra Santa – el lugar privilegiado de la historia de la salvación, cuyo suelo fue recorrido por el Salvador, y donde tuvieron lugar su encarnación, nacimiento, pasión, muerte y resurrección - teatro cotidiano de destrucciones, conflictos, lutos y violencias. A la instalación artística se le ha dado el nombre de “Natividad de Belén 2024”. Fue diseñada por dos artistas de Belén: Johny Andonia y Faten Nastas Mitwasi. Se trata de una estructura principal de 3 metros de altura, constituida por una base de forma circular, con estantes en los que se exponen una variedad de belenes y, en la parte superior, la famosa estrella de Belén. En la representación se asocian las tradiciones centenarias de los artesanos locales con elementos contemporáneos. Los materiales utilizados son hierro para la estructura principal, madera de olivo para las estatuas de la Sagrada Familia y otras representaciones, pero también nácar, piedra, cerámica, vidrio, fieltro y tela. Durante la preparación, recogida y construcción de las obras de arte, los artistas colaboraron con algunas instituciones cristianas locales.

De Ledro, en Trentino, llega el majestuoso abeto maduro, de 29 metros de altura. La elección de este ejemplar ha sido determinada, no solo por un valor estético, sino también por uno ecológicamente responsable, ya que la extracción del árbol garantizará el recambio natural del bosque durante las próximas décadas. Los bosques del territorio están certificados por PEFC. Un bosque certificado PEFC es un bosque gestionado de acuerdo con los requisitos ambientales, sociales y económicos más estrictos. El rebrote anual de los bosques de Ledro está certificado en 8.260 metros cúbicos y el abeto extraído forma parte de uno de los lotes que deberán cortarse para el correcto cultivo del bosque.

La iniciativa del regalo navideño de origen ledrense al Papa Francisco no se ha limitado, sin embargo, al abeto principal: asociaciones, instituciones, entes, simples ciudadanos - activados tanto individualmente como en grupos - se han dedicado a la decoración de otros 39 árboles de dimensiones menores, comprados y procedentes de cultivos dedicados, para destinarlos a oficinas, lugares públicos y palacios de la Santa Sede.