El Congreso de la UPU en Dubái: decisiones que redefinen el futuro del servicio postal global
El 19 de septiembre concluyó el 28.º Congreso de la Unión Postal Universal (UPU), con la participación de la Delegación Vaticana encabezada por el ingeniero Antonino Intersimone, Director de la Dirección de Telecomunicaciones y Servicios Informáticos, acompañado por el padre Felice Bruno (FDP), responsable del Servicio de Correos y Filatelia del Vaticano, y el doctor Vincenzo Marrese.
Uno de los principales logros del Congreso fue la aprobación de la nueva estrategia cuatrienal para el período 2026-2029, conocida como Estrategia de Dubái, junto con su correspondiente plan operativo, el Plan Empresarial de Dubái.
Estos documentos orientan la acción futura de la UPU en torno a tres objetivos estratégicos principales: fortalecer el territorio postal único mediante un sistema multilateral; innovar y transformar el servicio postal con una mayor digitalización, nuevos modelos centrados en el cliente y mejoras en la calidad del servicio; y fomentar la cooperación regional, con especial atención a los países en vías de desarrollo, para que nadie quede atrás en el nuevo panorama postal global.
Durante el Congreso se confirmaron nuevamente los dos cargos directivos principales: el Director General, Masahiko Metoki (Japón), y el Subdirector General, Marjan Osvald (Eslovenia). La reelección del Director General de la UPU se llevó a cabo por aclamación. El segundo mandato de Metoki y Osvald comenzará el 1 de enero de 2026 y finalizará el 31 de diciembre de 2029.
Asimismo, se renovaron los dos principales órganos de gobierno: el Consejo de Administración y el Consejo de Explotación Postal.
Las decisiones adoptadas en Dubái deberán traducirse en acciones concretas en los próximos años. Algunos de los principales desafíos incluyen: la adaptación de los reglamentos postales internacionales a los estándares modernos, por ejemplo, en cuanto a intercambios y tarifas; el equilibrio entre la presión competitiva de los operadores privados (especialmente en el comercio electrónico) y el papel de los operadores postales tradicionales; garantizar que los países con menos recursos puedan implementar las innovaciones, especialmente digitales y de infraestructura; y supervisar el cumplimiento de los compromisos en materia de sostenibilidad e inclusión, para evitar que queden solo en el papel.
El Congreso de la UPU en Dubái marca un punto de inflexión para el sector postal mundial: ya no se trata solo del transporte de cartas y paquetes, sino de un ecosistema complejo que abarca lo digital, la logística, las finanzas y la sostenibilidad. La Estrategia de Dubái establece una hoja de ruta ambiciosa pero realista para los próximos cuatro años.
La participación de la Delegación Vaticana permitió representar las necesidades nacionales en un contexto multilateral y contribuir a la definición de las políticas postales globales del futuro.
