• CUERPO DE BOMBEROS

    Notas históricas sobre el Cuerpo de Bomberos

    Ya durante el Estado Pontificio existía un Cuerpo de Bomberos, organizado militarmente, armado, dotado de equipos contra incendios, con elegantes uniformes, como atestiguan grabados y acuarelas, fechables hacia el año 1820, conservados en el Archivo Vaticano y en la Biblioteca Nacional. A principios del siglo XX, en los Sacros Palacios Apostólicos funcionaba un servicio de Guardia de Incendios.

    En 1941, bajo el pontificado de Pío XII, se constituyó el Núcleo del Cuerpo de Bomberos, cuando la situación bélica aconsejó la creación de un grupo operativo bien organizado, adiestrado y equipado en la Ciudad del Vaticano y en las zonas extraterritoriales.

    Los cuarteles del Núcleo se alojaron en locales especialmente equipados en los Palacios Vaticanos, con entrada desde el Cortile del Belvedere, donde actualmente se encuentra el Cuerpo.

    Al Cuerpo de Bomberos se le encomendó la protección especial de San Antonio Abad, que se venera el 17 de enero.

    En 2002, con la Ley sobre el Gobierno del Estado, se creó la Dirección de Servicios de Seguridad y Protección Civil, a la que se adscribieron el Cuerpo de Gendarmería y el Cuerpo de Bomberos -como ya se ha mencionado-, hasta entonces bajo la jurisdicción de la Dirección de Servicios Técnicos de la Gobernación.

    Desde entonces, se ha iniciado una verdadera reorganización del Cuerpo, que se ha dotado de personal altamente cualificado, incorporado a la plantilla tras asistir a cursos en la Escuela de Formación Básica del Cuerpo de Bomberos de Roma, de medios e instrumentos sofisticados y de un nuevo uniforme azul confeccionado con materiales conformes a la normativa vigente. El cuartel también fue objeto de una renovación radical para adaptarse a las nuevas exigencias; de hecho, se construyeron salas para el personal y nuevas oficinas. Actualmente, el Cuerpo está encomendado a la protección de Santa Bárbara, que es también la patrona del Cuerpo de Bomberos de Italia, y de San León IV ¹.

    El Día de los Patronos se celebra el 4 de diciembre, celebración litúrgica de Santa Bárbara.

    Además de las tareas específicas de extinción de incendios, los bomberos llevan a cabo actividades de emergencia y prevención para proteger a las personas y los bienes. Es el cuerpo que tiene, como tareas institucionales, la protección de la vida humana, y la salvaguarda de los bienes y del medio ambiente de los daños y peligros causados - no sólo por incendios - sino también por otras situaciones accidentales o malintencionadas, prestando asistencia directa y con la necesaria y conveniente inmediatez.

    También se ocupan del control de los equipos de lucha contra incendios situados en la Ciudad del Vaticano y en algunas zonas extraterritoriales. También realizan tareas de protección civil en colaboración con sus colegas Gendarmes, todos ellos empleados de la misma Dirección.

    Dada la enorme importancia religiosa e histórico-artística del Estado de la Ciudad del Vaticano, auténtico cofre de tesoros considerados patrimonio de toda la humanidad, y también de valiosos documentos en papel de fundamental importancia conservados en el Archivo y Biblioteca Apostólica Vaticanos, el Cuerpo de Bomberos tiene una gran y delicada responsabilidad en las actividades de prevención y control. Precisamente por este motivo, dada la peculiar actividad y conocimiento de las alarmas y de todos los dispositivos de seguridad, el personal debe estar técnicamente preparado, también a través de continuos cursos de actualización.

    Son innumerables las intervenciones realizadas diariamente por el Cuerpo de Bomberos: controles y mantenimiento de vehículos y equipos contra incendios, rescates tras accidentes, inestabilidad estática, inundaciones, accidentes de tráfico, retirada de vehículos, y todas las situaciones de peligro común, más o menos graves, para las personas y las cosas, así como las diversas operaciones de apoyo a las demás Direcciones de la Gobernación (Servicios Técnicos, Servicios Generales, Museos Vaticanos, etc.).

    En el helipuerto de los Jardines Vaticanos se lleva a cabo un servicio especial de extinción de incendios con ocasión de las llegadas y salidas del Santo Padre y otros mandatarios.

    El Cuerpo de Bomberos se rige por un reglamento específico promulgado por un período experimental de dos años mediante el Decreto del Cardenal Presidente del Governatorato n. 488840 de 10 de noviembre de 2009. Actualmente consta de 30 bomberos, dirigidos por un Oficial Coordinador.

     

    Requisitos para la inscripción en el Cuerpo de Bomberos

    Para participar en las selecciones, en la inscripción en el Cuerpo de Bomberos del Estado de la Ciudad del Vaticano, los candidatos, además de los requisitos establecidos por el Reglamento General del Personal del Estado de la Ciudad del Vaticano, deben ser:

    • solteros;
    • varones;
    • tener entre 21 y 25 años por cumplir;
    • de constitución psicofísica sana y poseer aptitud para las funciones, que se evaluará mediante examen médico específico;
    • bachillerato o titulación equivalente;
    • profesión y práctica de la fe católica.

    La solicitud deberá ir acompañada de una carta de presentación de su párroco, o de un sacerdote que pueda garantizar un conocimiento serio del interesado.

    La pertenencia al Cuerpo de Bomberos, a la Protección Civil o la obtención de cualificaciones específicas en el ámbito de la seguridad en el lugar de trabajo son cualificaciones preferentes.

    La solicitud puede dirigirse a “Corpo dei Vigili del Fuoco - 00120 Città del Vaticano”.

     

    Teléfonos y direcciones de correo electrónico

    Bomberos (Vigili del Fuoco) (Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..): +39. 06.69883811

    Bomberos - emergencias: +39.06.698112


    ¹   Recordado como el Pontífice que, en el año 847, según el Liber Pontificalis, al impartir la solemne Bendición desde la Logia de las Bendiciones de la Basílica Vaticana, apagó milagrosamente el incendio que se había declarado en el cercano barrio del Borgo, salvando así a la iglesia y a la población. Es famosa la Sala del Incendio del Borgo, en los Museos Vaticanos,decorada con frescos por Rafael.