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El Presidente de la Gobernación participó en la 143ª Convención Suprema de los Caballeros de Colón

Heraldo de esperanza

«De modo particular durante este Año Santo, estamos llamados a ser signos tangibles de esperanza para nuestros hermanos y hermanas que atraviesan dificultades de toda índole». Esta fue la exhortación dirigida por el Papa León XIV a los Caballeros de Colón, reunidos en Washington D.C. con ocasión de la 143.ª Convención Suprema, celebrada del 4 al 7 de agosto.

En el videomensaje difundido el miércoles 6 de agosto, el Santo Padre subrayó que el fundador de los Caballeros, el Beato Michael McGivney, comprendió en profundidad que debía ser un signo de esperanza y «percibió las múltiples necesidades de los católicos inmigrantes, procurando aliviar a los pobres y afligidos mediante la fiel celebración de los sacramentos y el auxilio fraterno, un auxilio fraterno que perdura hasta nuestros días».

Entre quienes escucharon el mensaje del Papa se encontraba también la Presidenta de la Gobernación, Sor Raffaella Petrini, que asistió a la 143.ª Convención Suprema invitada por el Caballero Supremo, Patrick E. Kelly.

En su intervención, el Papa León XIV destacó que el lema de la Convención de este año —«Heraldo de esperanza»— «os recuerda a todos vosotros, Caballeros de Colón, la llamada a ser signos de esperanza en vuestras comunidades locales, parroquias y familias».
Agradeció, además, los esfuerzos realizados «para congregar a hombres en vuestras comunidades en torno a la oración, la formación y la fraternidad, así como las numerosas obras caritativas llevadas a cabo por vuestros consejos locales en todo el mundo». En particular, añadió: «Vuestro generoso servicio a las poblaciones vulnerables —incluidos los no nacidos, las madres gestantes, los niños, los desfavorecidos y cuantos padecen el flagelo de la guerra— lleva esperanza y consuelo a muchos y prolonga la noble herencia de vuestro fundador».

Por su parte, Patrick Kelly declaró: «En nombre de más de 2,1 millones de Caballeros de Colón en el mundo entero, nos honra recibir este histórico videomensaje de Su Santidad el Papa León XIV, el segundo que dirige al público estadounidense». Añadió asimismo que «el lema de esta Convención Suprema, Heraldo de esperanza, invita a nuestros miembros y a todos los varones católicos a acoger el mensaje del Santo Padre y a llevar esperanza a los demás mediante el servicio y el sacrificio. Unidos, prometemos al Papa León XIV nuestras oraciones y nuestra fidelidad, y permaneceremos siempre a su lado».

Durante la Convención, Ann Mary Glendon, exembajadora de los Estados Unidos de América ante la Santa Sede durante la presidencia de George W. Bush, fue galardonada con el Premio Gaudium et Spes. Entre los motivos que justifican tal distinción, destaca su servicio a la Iglesia católica, en la que ha desempeñado cargos de alta responsabilidad en diversos organismos vaticanos, en particular como Presidenta de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales y como primera mujer en ejercer el cargo de Jefa de Delegación de la Santa Sede en una conferencia internacional convocada por las Naciones Unidas. En dicho cometido, «se opuso con firmeza a las iniciativas relativas al aborto y al control de la población con ocasión de la histórica conferencia mundial sobre la mujer celebrada en Pekín en 1995. Ha defendido la libertad religiosa tanto en su país como en el extranjero, y ha prestado asesoramiento a los tres Sumos Pontífices precedentes en cuestiones tan diversas como el papel de la mujer en la Iglesia o la reforma del Instituto para las Obras de Religión».

La Presidenta de la Gobernación participó en la Santa Misa de apertura de la Convención, celebrada la mañana del martes 5 de agosto en la Basílica del Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción. Asistió también a la sesión inaugural, en la que el Caballero Supremo presentó su informe anual. La mañana del miércoles 6 de agosto, tras acudir a la Misa matutina, fue invitada de honor en el almuerzo de damas (ladies’ luncheon).

La Convención Suprema de los Caballeros de Colón constituye la asamblea anual de mayor relevancia para la institución: un auténtico congreso internacional que reúne a los líderes y miembros de la orden procedentes de todo el mundo.

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