18 de julio: San Bruno de Segni, Obispo

Al servicio de los Papas y de la Iglesia

San Bruno de Segni nació entre los años 1045 y 1049 en Solero d’Asti (actual provincia de Alessandria), en el seno de una familia modesta. Fue educado por los benedictinos y prosiguió sus estudios en la Universidad de Bolonia, donde se especializó en el trivium y el quadrivium. Ordenado sacerdote, fue nombrado canónigo en Siena y comenzó a escribir comentarios a diversos textos bíblicos.

En 1079 participó en el Sínodo de Roma que refutó la herejía de Berengario de Tours sobre la Eucaristía. En esa ocasión fue notado por el papa Gregorio VII, quien lo nombró obispo de Segni. Bruno apoyó con valentía la reforma gregoriana, oponiéndose a la simonía, al concubinato clerical y a las investiduras laicas. Por ello fue encarcelado en varias ocasiones, pero jamás dejó de sostener al papado.

Estuvo también al lado de Urbano II, participando en sínodos importantes como los de Piacenza y Clermont (1095), donde se proclamó la Primera Cruzada. A causa de nuevas tensiones políticas, fue nuevamente encarcelado, tanto en Segni como en Roma, en la Mole Adriana. Liberado en 1103 y deseoso de paz, se retiró al monasterio benedictino de Montecassino, donde vivió con gran fidelidad a la Regla. Al cabo de solo cinco años de vida monástica, fue elegido abad.

El Papa Pascual II, aunque contrariado por el abandono de la diócesis, reconoció sus cualidades y le confió diversas misiones diplomáticas, incluso como legado pontificio.

En 1110, Bruno se opuso con firmeza a la concesión del derecho de investidura imperial que Pascual II había otorgado a Enrique V. Por este motivo perdió el privilegio de acumular los cargos de abad y obispo. Con humildad, renunció a Montecassino y regresó a Segni en 1111, donde fue acogido con gran alegría.

Durante sus últimos años se dedicó a la oración, al estudio y al cuidado pastoral de su diócesis. Falleció el 18 de julio de 1123 en Segni, donde fue sepultado en la catedral. Autor de importantes escritos teológicos y litúrgicos, fue canonizado en 1183 por el papa Lucio III.